Entre las principales metas que acometerá la entidad figuran elevar en un millón el número de clientes particulares, que en la actualidad suma 2,1 millones, así como incrementar en 160.000 los clientes corporativos, que en la actualidad ascienden a 285.000, lo que estiman que en total equivaldrá a un crecimiento del 30% en el número de clientes por oficina, que pasará de los 1.800 actuales a 2.340.
Además, tal y como ya adelantó recientemente su dirección en la presentación de resultados, el banco quiere que la tasa de concesión de créditos aumente anualmente en el periodo un 5,5%, al tiempo que desea lograr que los depósitos crezcan a ritmos del 10%. Con respecto al margen de intereses el objetivo es conseguir un crecimiento anual del 4,1% y del 8,6% en las comisiones, con un incremento de los costes del 1,8%.
Para el ejercicio en curso, los gestores de la entidad esperan que, gracias al aumento del perímetro, por la incorporación del Guipuzcoano, el margen de intereses registre un crecimiento del 7% y las comisiones del 10%, con un incremento del 9% en los gastos recurrentes.
El equipo directivo manifestó que respecto a la capacidad de financiación y a la base de capital, que en la actualidad acaparan en interés del mercado, la entidad cuenta con unos vencimientos asequibles y una situación de core capital holgada, habiendo reforzado desde el cierre de 2010 este ratio desde el 8,2% hasta el 8,9%, con recompras de deuda y una ampliación de capital. Los gestores establecen en 50 puntos básicos el impacto de BIS III, que entrará en vigor en 2013.
Las noticias de esta presentación fueron bien recibidas en el mercado. Su cotización se revaloriza en 2011 algo más del 12%.