El Banco de Crédito e Inversiones es una de las principales instituciones financieras de Chile y se ha convertido en la segunda empresa procedente de este país que obtiene financiación y capta inversores a través de la Bolsa Mexicana de Valores. "Esta colocación es un hecho significativo, ya que refleja la confianza y la solidez depositadas en la economía mexicana y en particular a nuestro mercado de valores como alternativa de financiación, con costes competitivos y un marco legal transparente", señalaba el presidente del Grupo Bolsa Mexicana de Valores, Luis Téllez, en el acto de timbrazo simbólico de inicio de operaciones del BCI en el mercado bursátil de México.
El BCI ha llevado a la Bolsa de México un programa de certificados bursátiles de 8.000 millones de pesos mexicanos. Y reabre el debate sobre por qué no cotizan en la Bolsa mexicana los grandes bancos que operan en el país. Una discusión que afecta mucho más al BBVA que al Santander, los dos grandes bancos españoles presentes en México (‘la Caixa' está en Inbursa, y el Sabadell, en el Banco del Bajío).
Primero, porque el presidente del grupo Santander, Emilio Botín, es partidario de que las filiales coticen en la Bolsa local, como quedó demostrado con el espectacular éxito registrado por la oferta pública de venta de acciones del Santander Brasil. Si no ha habido más operaciones, es por la situación de los mercados, que han obligado a aplazar las salidas a Bolsa de las filiales en el Reino Unido y en Argentina.
Y segundo, porque el Santander tiene intención, a medio y largo plazo, de sacar a Bolsa a su filial mexicana. El plan estratégico del Santander en México pasa por alcanzar el liderazgo, ahora en manos de Banamex (del norteamericano Citi) tras desbancar al BBVA Bancomer como mayor banco por volumen de activos, a finales de 2012. Una vez conseguido ese objetivo, el Santander puede plantearse que su filial cotice en la Bolsa Mexicana de Valores, como ya lo ha hecho en Brasil. Para hacer realidad esa aspiración hacen faltar "un par de años", señalan en Santander México.
En cambio, el BBVA mantiene su negativa a volver a tener en la Bolsa Mexicana de Valores a Bancomer. El presidente de la filial mexicana, que también lo era de la Asociación de Bancos de México hasta hace unos meses, Ignacio Deschamps, rechaza incluso que cotizar en Bolsa mejore la transparencia de una empresa, mientras en la casa matriz española señalan que Bancomer sólo cotizará en Bolsa si el Gobierno mexicano promulga una ley obligando a las filiales de bancos extranjeros a hacerlo.
Las filiales de bancos extranjeros en México deben cotizar en la Bolsa Mexicana de Valores, defiende Eduardo Gómez Alcalá, socio a cargo del área regulatoria y de cumplimiento de la firma de auditoría y consultoría Pricewaterhouse Coopers. "El hecho de que coticen en Bolsa es algo bueno, porque habría más ojos, y entre más ojos haya, va a ser más rico el análisis y el escrutinio que se puede tener. Sí ayudaría a tener un espectro de supervisión mucho más amplio, ya que no solo incluyes la supervisión de las autoridades, sino también la supervisión del público en general y hay más transferencia e información", argumenta.
El presidente del consejo de administración de Banorte, Guillermo Ortiz Martínez, reclama que se legisle para que las filiales de los bancos extranjeros coticen en la Bolsa Mexicana de Valores, y aplaude que el Santander sacara su filial a la Bolsa de Brasil. Ortiz era el máximo responsable del Banco de México (que no tiene competencias sobre las entidades financieras, que corresponden a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores) cuando Francisco González excluyó a BBVA Bancomer de la Bolsa mexicana. Y criticó duramente, y de forma pública, al BBVA por esa medida, que iba en contra de la transparencia de la banca en México. Como presidente de Banorte, Ortiz ha puesto en marcha un plan estratégico para ser el mayor banco de México, desbancando a las filiales de grupos extranjeros, como BBVA, Santander o Citi.
Luis Niño de Rivera, de la Asociación Bancaria de México, discrepa de esa obligatoriedad, ya que "listarse en Bolsa es una decisión financiera, y no regulatoria". Para Ignacio Deschamps, cotizar en Bolsa no es una decisión vinculada a la transparencia de los bancos en México, sino una acción de negocios de cualquier empresa.