Los bancos centrales realizarán tres subastas en dólares con vencimiento a tres meses antes de que concluya el año: el 12 de octubre, el 9 de noviembre y el 7 de diciembre. Serán operaciones de recompra de activos admitidos como garantía, a tipo fijo y sin límite en la cantidad adjudicada. Estas subastas extraordinarias no suponen la desaparición de las que desde mayo de 2010 se celebran en dólares a una semana.
En ese clima, el Tesoro ha logrado cerrar con éxito la subasta de obligaciones de ayer, pese a la desconfianza existente en los mercados. Ha captado 3.949,98 millones de euros, prácticamente el máximo previsto, en una jornada marcada por el acuerdo entre Sarkozy y Merkel sobre Grecia y, por tanto, el alejamiento de una quiebra de este país. En obligaciones con vencimiento el 30 de julio de 2019, con un cupón del 4,6%, ha logrado 1.021,6 millones, a un tipo de interés marginal del 4,998%. En obligaciones con vencimiento a 30 de abril de 2020, con un cupón del 4%, son 1.396 millones, al 5,05%. Y en obligaciones con vencimiento a 31 de octubre de 2020 y con un cupón del 4,85%, 1.532 millones, a un tipo de interés marginal del 5,194%.
La subasta de ayer es la segunda emisión a largo plazo tras la crisis de deuda de agosto, y que obligó al BCE a comprar bonos a cinco años (también títulos italianos) en la colocación del 1 de septiembre. Entonces, el Tesoro logró 3.621,22 millones de euros, en la parte media del objetivo, con un cupón del 4,25%, y un tipo de interés marginal que se moderó: del 4,891% del 7 de julio al 4,518%. Era la tercera subasta consecutiva con descenso del coste de financiación de la deuda pública española.
El 23 de agosto, el Tesoro adjudicó 2.941,03 millones de euros en letras a tres y seis meses, en el rango alto del objetivo previsto de hasta 3.000 millones de euros, y lo hizo además con tipos de interés más bajos. El 16 de agosto, fueron 5.696 millones en letras a 12 y 18 meses, en el rango medio de los objetivos de la subasta, pero con un interés marginal inferior al de la anterior subasta y con una demanda de 13.882 millones, más del doble del importe adjudicado.
A principios de agosto, el Tesoro captó 3.311 millones de euros en la emisión de bonos a tres años y en la reapertura de una línea de obligaciones con vencimiento el 31 de enero de 2015, cerca del rango alto de los objetivos previstos, de entre 2.500 millones y 3.500 millones. La emisión de bonos, que fue de 2.200 millones, tuvo una demanda de 4.716 millones, y registró un tipo de interés marginal del 4,9%. Y la emisión de obligaciones con vencimiento en 2015 se saldó con una colocación de 1.111 millones de euros, una demanda de 2.668 millones, y un tipo del 5,05%.