Los mercados aplauden la venta de la filial en Estados Unidos del BBVA, ya que el grupo presidido por Carlos Torres gana músculo para poder acometer una integración del Banco Sabadell que le permita restar diferencias en el mercado español con el banco resultante de la fusión entre CaixaBank y Bankia.
"El acuerdo fortalece nuestra ya sólida posición financiera. Nos aporta mucha flexibilidad para invertir de forma rentable en nuestros mercados, impulsando nuestro crecimiento a largo plazo", afirma el presidente del BBVA. Además, Carlos Torres hace un guiño a los accionistas con una mayor remuneración cuando el Banco Central Europeo (BCE) permita la distribución de dividendos.
La venta de la filial en Estados Unidos se produce después de que el consejero delegado del BBVA, Onur Genç, descartara recientemente una operación de este tipo. El banco estadounidense cerró los nueve primeros meses del año con un beneficio de 115 millones que supone un 4% en la contribución al conjunto del grupo.
La operación se cerrará, según lo previsto, a mediados de 2021. Precisamente, ese plazo es que el se han fijado los máximos responsables del Sabadell para estudiar cualquier fusión o integración en el mercado español. El grupo presidido por José Oliu está desde hace meses en todas las quinielas para alguna operación corporativa, una vez que Bankia, su objetivo desde hace tiempo, acabará en manos de CaixaBank.
Sin ampliaciones
La oferta en efectivo de PNC valora el negocio vendido a 19,7 veces su resultado en 2019 y a 1,34 veces su patrimonio tangible a 30 de septiembre de 2020. Según el BBVA, la transición aflora el valor de la filial pues el precio representa más de 2,5 veces la valoración media que asignan los analistas a la franquicia (3.800 millones de euros).
La operación tendrá un impacto positivo en la ratio CET1 fully loaded de aproximadamente 300 puntos básicos, equivalente a 8.500 millones de euros de generación de capital y elevaría la ratio de solvencia pro-forma hasta el 14,5% al cierre del tercer trimestre del actual ejercicio. La plusvalía sería de unos 580 millones de euros.
De esta manera, el grupo presidido por Carlos Torres evitaría tener que realizar una ampliación de capital millonaria, según lo previsto por varios analistas, para abordar una fusión por integración del Banco Sabadell. Esta potencial operación supondría reforzar su unidad en España que, en los últimos trimestres, ha tenido un comportamiento más errático hasta quedar como la tercera unidad geográfica en su contribución (16%) al beneficio atribuido del grupo.
En contraposición, su salida de Estados Unidos supondrá para el BBVA una menor presencia en economías desarrolladas y un peso aún superior de países emergentes. México supone el 45% del total del beneficio del grupo y Turquía ha incrementado su peso hasta el 19%.