La batalla sube de intensidad con el paso de los días. De lo que se trata es de no desaparecer del ránking de mejores ofertas. Y para eso no hay término medio: o se paga bien o se opta por el ostracismo, porque poco a poco se ha ido conformando un cuadro de ofertas donde las entidades se pisan los talones para no quedarse fuera de juego.
Hay mucho dinero esperando su oportunidad y cada vez menos bancos están por la labor de dejarla pasar. Ahora mismo, quien no da en torno al 1% es casi un 'outsider'. En estos momentos, además de Openbank, entidades extranjeras como Orange Bank, Renault Bank, MyInvestor o Pibank están ofreciendo ese 1% también, con distintos importes máximos remunerados y, en general, sin condiciones asociadas.
Pero es que hay más movimientos por debajo. Entidades europeas muy desconocidas en España como Lea Bank o Klarna están ofreciendo tipos TAE del 0,96% y del 0,95% respectivamente. Tienen menos potencial comercial que cualquiera de los mencionados que están un pequeño escalón por encima, pero en conjunto configuran un catálogo de ofertas muy amplio y también muy atractivo.
Tipos sibiendo
¿Dónde está el techo? "Los tipos van a seguir subiendo, y con fuerza, hasta final de año. Pero la intensidad de esa alza dependerá de cuánto suba a partir de ahora el precio del dinero en la zona euro. Lo que está claro es que esos tipos de referencia del 1% TAE en las cuentas sin condiciones van a ser superados muy pronto. Hay entidades con capacidad para seguir estirando la cuerda" señalan fuentes del sector.
La realidad es que las últimas subidas empiezan a dejar en evidencia a algunas grandes entidades que han jugado sus cartas hace poco pero vuelven a quedar rezagadas. El caso más claro entre los gigantes es el de ING, que recuperó para la 'Cuenta Naranja' una rentabilidad del 0,3% que se está quedando muy, muy desfasada, respecto a las propuestas de sus competidores más dadivosos en precio.
En fuentes del sector se asegura que estas grandes entidades se podrían ver obligadas muy pronto a volver a mejorar sus propuestas sino se quieren resignar a aceptar un rol totalmente secundario en la oferta de cuentas. "Los ahorradores están buscando el mejor destino para su dinero y son cada vez más exigentes", señalan en fuentes del sector que prevén emociones muy fuertes al menos hasta que acabe 2022.