En los últimos dos años y medio, el petróleo ha registrado una subida meteórica desde los 23 dólares que cayó al inicio de la pandemia hasta los casi 112 dólares. Desde comienzos del mes de mayo de este año, la cotización del petróleo del Mar del Norte comenzó a caer por diversos factores como el alza del dólar y unas expectativas de caída de la economía en todo el mundo, debido a la subida de los tipos de interés para controlar la inflación. Desde los 1120 dólares de mayo, el Brent ha caído hasta los 90 dólares por barril.
El último revés del petróleo ha sido el debilitamiento de la economía china. Según la AIE, la demanda de crudo por parte de China va a registrar su primera caída anual de las últimas tres décadas, desde el año 1990. En este momento la agencia calcula que China va a rebajar su demanda en un 2,7%. La situación de las economías occidentales, así como la dificultad del país asiático para controlar los brotes de Covid son factores que están empujando a la baja la cotización de esta materia prima.
“La recesión china está siendo parcialmente compensada por el uso "robusto" del petróleo en muchos países para la generación de energía, a medida que se alejan del costoso gas natural, dijo la AIE. Este absorberá unos 700.000 barriles diarios en el cuarto trimestre y principios de 2023, el doble de los niveles observados hace un año”, indican fuentes del mercado.
Vuelve Libia
La AIE señala que la utilización de reservas estratégicas ha permitido que el mercado del petróleo se mantenga tras el estallido de la guerra, aunque advierte la situación es muy diferente en el combustible diesel que se utiliza para los camiones y el que se utiliza en la navegación aérea.
El inesperado regreso de Libia al mercado productor de crudo ha constituido también un factor para la caída de los precios. Se calcula que en el segundo semestre de este año, se va a mantener un exceso de oferta de casi un millón de barriles al día.
Para el próximo año, la Agencia Internacional de la Energía estima que la demanda de petróleo se recuperará con fuerza en tanto China alivie los confinamientos que está llevando a cabo por el Covid. En cualquier caso, se estima que la desaceleración económica restará fuerza a la demanda en este último tramo de 2022.
Las exportaciones de petróleo ruso por vía marítima se verán afectadas por las sanciones de la Unión Europea. Se calcula que esto llevará a una reducción de 1,9 millones de barriles diarios en la producción de este país, hasta los 9,5 millones de barriles al día.